ATALAYAS PERDIDAS-2

 

Quiero herirte si digo que te amo

Parece que ya hemos llegado la masacre será pasado

Extrañaremos la casa y entonces escribiré sobre lo que amo

Qué hay tras esta calle

Tu y yo nunca sufrimos de la misma manera

Tus venas explotan lejos de mí lejos de ti se desgastaron

        Mis viejas amistades

Y entre los dos no hay más que desiertos democracias pueblos arrasados

        En cal viva

Desde el cieno del río los ahogados me señalan con el dedo

Dónde quedan los arrabales dónde los puentes levadizos

Ya no hay armas para esconder en las cunas

No poseo más que una deteriorada libertad no más que un olvidado bantustán

Dime, bajo qué bandera bendeciremos de nuevo nuestro amor

En qué aguas en busca de qué arrecifes

Copiaré una hermosa proclama

        En todas tus heridas hay párrafos que nunca han sido leídos

Somos los que estamos

En nuestras filas no hay soldados desconocidos libertades al por mayor

Ya lo ves, mis sentimientos son fáciles de desarticular

Quiero herirte desde la trinchera cubierta de un poema

Poseo avenidas de árboles astillados, un cielo

Como un campo de fútbol regado cada noche

        Y puestos que abandonar

Construyo mal los puentes no sé escribirte

        No sé amarte en esta incómoda paz

Somos estibadores panaderos cobardes

Los que estamos

Y aguardando la sequía que limpiará el río

Aprenderé a recoger tu cuerpo en mi regazo, aprenderé a

        Cargarlo al hombro

Si dejo de escribir parecerá que no hay dolor aquí

Que los piquetes de la felicidad se han apoderado de todas las fábricas

        De todas las colinas de las calles

Y yo quiero herirte cuando te amo

 

 

© Jose Luis Otamendi
© itzulpenarena: Iñigo Aranbarri


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