PROPIEDADES
No te deseo la gloria de los desaparecidos
Una suerte de aterrizaje que no concluirá
Mirarse a los ojos como parques vacíos
Me preguntas acerca de lo que hemos ganado y perdido
Acerca de las victorias y derrotas hojeo los archivos del sueño
Arterias desligadas
Buscando malas noticias que puedan aproximarte
Digo que te amo fríamente
Digo que estoy desesperado porque con lo que sé
Nada puede salvarse
Ni amistad ni arrabales ni tierra empapada
Digo que quizás fuese mejor que nunca se sepa qué sobrellevamos
En el corazón, que no se sepa nunca
Puede que sea ya tarde para amar una tierra incómoda
Y que el recuerdo desaparezca delante de esta mesa
Junto con la comida
Te llamo continuamente pero ni hay atalaya tan alta
Como para que me veas
No te he ofrecido este amor para reivindicarlo con poemas perfectos
No te colocaré señales secretas en el balcón
Siempre hemos sido tan libres como para odiar a los nuestros
Este odio es demasiado antiguo para que pueda rendirse
En cualquier otra parte
Soy yo quien está a cargo de tu corazón y quiero que ahí
Me acaricies me escribas me hables
Puede que nunca se hallen las pruebas perdidas
Puede que un hermoso sobresalto no pueda frente al abandono
De toda una vida
En tal caso el cavar deja puertas cerradas para siempre
Países desocupados que se habitan una y otra vez
Amores de última hora cuya hermosura resulta insoportable
Y las sombras extienden la mano para que te ame echándote de menos
Es tan necesario el desconsuelo para poder volver
Y podrás transportar dentro de ti esta habitación puentes páginas
Estos mensajes no son ni tu corazón ni el mío, no son
Corazón de nadie
© Jose Luis Otamendi